Garategaray, Martina, Unidos, la revista peronista de los ochenta. Bernal: Universidad Nacional de Quilmes, 2018, pp. 151.

 

Por  Ernesto Roland

Centro de Investigaciones de la Facultad de Filosofía y Humanidades

Instituto de Humanidades

Universidad Nacional de Córdoba

Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas

Córdoba, Argentina

 

PolHis, Revista Bibliográfica Del Programa Interuniversitario De Historia Política,

Año 12, N° 24, pp. 159-161

Julio- Diciembre de 2019

ISSN 1853-7723

 

 

El libro de Martina Garategaray recupera los resultados de su tesis de doctorado, realizada bajo la dirección de Carlos Altamirano. La autora reconstruye la historia de la revista Unidos y, en cierta medida, del grupo de políticos e intelectuales peronistas que participaron de la publicación dirigida por Carlos “Chacho” Álvarez. La obra se ubica dentro de la historia intelectual, al reconocer a las revistas político-culturales como un objeto de estudio con status propio. La autora indaga tres dimensiones: Unidos como actor identitario que acompañó críticamente el derrotero del peronismo desde la salida democrática hasta la consolidación del menemismo, la cultura política peronista y la historia argentina de la década del ochenta. En relación al segundo y tercer nivel, el libro puede ser considerado un aporte para la historia política reciente.

El primer capítulo rastrea el surgimiento de la revista, su estructura interna y composición. Se observa que el primer número, de mayo de 1983, comenzó a configurar la identidad de “los unidos”, al fijar al peronismo montonero como alteridad. Para ello, la revista rescató un pasado compartido por sus integrantes, vinculado a la JP Lealtad y las Cátedras Nacionales, delineando un “nosotros” identificado con el “peronismo de Perón”. Esta reposición del pasado buscó presentar al colectivo como un actor legítimo en el escenario democrático, y definir el terreno de sus intervenciones: el debate de ideas.

El segundo capítulo se focaliza en la lectura que la revista construyó sobre del último Perón. Allí se muestra cómo la figura del “león herbívoro” enunciada por el líder y la propuesta de “democracia integrada” de su último mandato, fueron vindicadas por Unidos para rescatar la pertinencia de su legado. Atenta a la interacción entre las miradas del pasado y las necesidades del presente, la autora observa la especificidad de la intervención de Unidos, orientada a legitimar la tradición peronista en el nuevo marco democrático. 

En el tercer capítulo se indagan los números de Unidos dedicados a la crisis del peronismo abierta tras la derrota de 1983, examinando el vínculo de la revista con la Renovación Peronista (RP) y la construcción de una distinción entre un peronismo deseable y otro que no lo era. Allí el trabajo incorpora fuentes como el manifiesto de renuncia al Partido Justicialista (PJ) firmado por 26 intelectuales peronistas en 1985, y declaraciones de Cafiero, líder de la RP bonaerense. La autora observa que el acercamiento a la RP produjo transformaciones en la identidad de Unidos; ya que allí tomó lugar la noción de construir una nueva fuerza política capaz de converger con otras, y la posibilidad de tomar distancia de las estructuras formales del PJ sin abandonar la identidad peronista.

El capítulo cuatro aborda la relación entre Unidos y el alfonsinismo y propone como hipótesis que la noción de democracia construida por Unidos partió de la revalorización que impulsó y consolidó el alfonsinismo. Para explorar esta tesis se indaga la auto-percepción de los unidos, y la interacción que sostuvieron con intelectuales afines al oficialismo radical y los discursos de Alfonsín. A partir de la mesa redonda “Democracia y Cambio Social” de 1985 y el “discurso de Parque Norte” enunciado por Alfonsín a fines de aquel año, la autora muestra que Unidos redefinió a la democracia enfatizando su ligazón con lo social y reconociendo al conflicto como un dinamizador de la participación colectiva; claves que, a criterio de la revista, estaban ausentes en el alfonsinismo.

Las interlocuciones de Unidos con la intelectualidad de la época también son trabajadas en el quinto capítulo. Allí se muestra que los diálogos sostenidos con miembros de revistas como Punto de Vista y La Ciudad Futura, modificaron la identidad de la publicación peronista, aspecto que se analiza desde una perspectiva relacional. La autora explora los debates sobre el pasado reciente y la figura del intelectual, destacando que Unidos compartió con la intelectualidad no peronista la adhesión al pluralismo político y la distancia crítica respecto de las opciones políticas. 

El sexto capítulo aborda la relación entre Unidos y el menemismo, desde el ascenso de Menem hasta las elecciones de 1991. Muestra que la publicación experimentó este periodo como una “nueva derrota” y ello la llevó a recrear el mito peronista de la renuncia para justificar el abandono del PJ y cuestionar la apropiación del legado peronista que, a su criterio, efectuaba Menem. Desde la tradición peronista la renuncia implicó la afirmación de la identidad, habilitando a los unidos a integrarsea nuevas experiencias frentistas de perfil progresista, sin abandonar su condición de peronistas. La autora vincula esta línea argumental con la trayectoria de Álvarez, su participación en el grupo de los ocho diputados opositores a Menem y las coaliciones políticas que impulsó durante los noventa. El libro concluye con un mapa de revistas con las que Unidos sostuvo intercambios y una recopilación de portadas y sumarios donde pueden rastrearse nuevas problemáticas para futuras investigaciones.